Principales causas de la fatiga respiratoria en ancianos

Fatiga respiratoria en ancianos

La fatiga respiratoria en ancianos puede tener un origen diferente al de la disnea en niños y adultos. Lo que no cambia es el sobreesfuerzo al que se ve sometido el organismo cuando, por el motivo que sea, una persona respira con dificultad.

En el caso de las personas mayores, el abordaje de la disnea obedece a un protocolo con más opciones que si hablamos de personas adultas, jóvenes y sin determinadas patologías concretas. El propio envejecimiento puede ser el responsable de la fatiga respiratoria al caminar en ancianos, sin que esto implique que no haya tratamiento. Vamos a ver cómo cuidar a una persona mayor con este síntoma, puntual o crónico.

Recuerda que, si esa persona no puede desplazarse para realizar la parte de fisioterapia, en Institució Ibars te ofrecemos soluciones en el propio domicilio.

Qué es la fatiga respiratoria

La fatiga respiratoria es otro nombre de la disnea, aunque este último término suele utilizarse para referirnos a síntomas de enfermedades respiratorias, infecciosas o inflamatorias.

Las causas de la fatiga respiratoria influyen en cómo afecta a la vida diaria. Si el origen es alérgico y la persona se encuentra medicada, notará los síntomas en condiciones concretas, mientras que si se debe a EPOC o a una insuficiencia cardíaca, las tareas cotidianas van a resultar más pesadas y causar también fatiga física o, incluso, ansiedad.

Por este motivo, es importante conocer a qué se debe la disnea en la persona mayor a tu cuidado. De este modo, además del tratamiento, podréis planificar horarios y formas de llevar a cabo una vida razonablemente activa, disminuyendo el cansancio o la sobrecarga para el corazón.

Qué provoca la fatiga respiratoria en ancianos

El propio envejecimiento

Los pulmones envejecen de manera similar a los otros órganos. Esto significa que las personas mayores presentan menor eficacia en el intercambio de gases en los alvéolos pulmonares, pero también van perdiendo con los años parte de la capacidad vital (máximo volumen espirado tras una inspiración profunda).

Otra causa de la fatiga respiratoria en personas mayores es la pérdida de eficacia en las contracciones musculares. Esto afecta a todos los músculos, incluyendo los implicados en el proceso de la respiración. La buena noticia es que esta causa, salvo si existe una lesión neurológica, es reversible con ejercicios específicos.

Enfermedades respiratorias

Desde resfriados o gripes hasta afecciones más severas, como la neumonía. El pronóstico de estas enfermedades en personas ancianas es peor que entre la población joven y el riesgo de complicaciones de catarros menores también se ve incrementado con la senectud.

Por eso, salvo contraindicaciones por alergias, se recomienda la vacunación sistemática de las personas de la tercera edad ante la gripe y otras posibles infecciones que afecten a las vías respiratorias.

Enfermedades coronarias

Cuando hay una insuficiencia cardíaca o problemas en las arterias coronarias, el sistema respiratorio debe trabajar más para asegurar la correcta oxigenación de la sangre. Si no logra compensarlo, aparece la disnea, junto con otros síntomas.

Anemia

Uno de los síntomas de anemia en ancianos es la fatiga respiratoria al caminar, al asearse, servirse la comida, etcétera.

Efectos secundarios de algunos fármacos

Cuando nos hacemos mayores, fármacos que tolerábamos bien pueden comenzar a causar efectos adversos serios. El médico intentará sustituirlos por otros y rebajar la dosis a la mínima efectiva. Si esto no basta, combinado con la fisioterapia y la organización para realizar las tareas diarias de manera escalonada, se aplicarán otras medidas como el aire enriquecido en oxígeno.

Otras enfermedades

Las enfermedades neurodegenerativas pueden comprometer la función respiratoria del paciente en etapas avanzadas, aunque no siempre.

Las enfermedades hepáticas y renales también pueden ser el origen de esa fatiga al llevar a cabo cualquier tarea sencilla, o al hablar.

Qué cuidados necesita una persona mayor con fatiga respiratoria

Ahora vamos a ver cómo aliviar la fatiga respiratoria en personas mayores, Ten en cuenta que hay puntos no aplicables a todos los ancianos, mientras que otros sí son generales.

Condiciones ambientales

De obligado cumplimiento, asegúrate de ventilar correctamente, evitando las corrientes de aire y los cambios bruscos de temperatura. Evita también los alérgenos (pueden estar dentro de casa o fuera).

Si vivís en zonas muy húmedas o muy secas, podría ser recomendable cambiar la humedad relativa en la habitación de la persona mayor. Consúltalo con su médico.

Higiene postural

Si una persona presenta disnea, debe dormir al menos con dos almohadas, o incluso semiincorporada, evitando siempre la posición recostada sobre una superficie completamente plana.

Fisioterapia, si procede

Cuando fallan los músculos implicados en la respiración, es posible mejorar al entrenarlos con ejercicios específicos. Estos ejercicios deben realizarse cada día, aumentando la dificultad hasta donde el paciente llegue sin experimentar toses o molestias importantes.

Aire enriquecido en oxígeno

Lo prescribe el médico, en caso de necesidad. Si esto sucede, también indicará la pauta de uso al cuidador principal.

Tratamiento para la apnea del sueño

Si cuidas a una persona con apnea del sueño y, para colmo, presenta fatiga respiratoria, su organismo va a estar sometido a mucho estrés físico. Tratad lo que es tratable y cuanto antes.

Comunicación directa con el médico

Las personas mayores pueden desarrollar una neumonía en cuestión de horas o en un par de días. Si cuidas a alguien mayor, no dudes en comunicarte con el médico, incluso con el 112, ante la presencia de síntomas extraños como ruidos al respirar, pérdida con la atención acompañada de fiebre, debilidad que ha aparecido de repente…

Las causas de fatiga respiratoria en ancianos son variadas y van a dictar cuál es el tratamiento más efectivo para conservar la calidad de vida. Si cuidas a una persona con disnea, debes conocer los síntomas que requieren consulta inmediata con un médico. Recuerda que, cuando no puedas estar atendiendo a esa persona, profesionales de nuestro equipo de Institució Ibars podemos relevarte, tanto en el domicilio como en el hospital.

También podemos echarte una mano con la fisioterapia respiratoria o enseñaros cómo planear la rutina diaria para que esa fatiga al respirar interfiera lo menos posible con un envejecimiento activo.